Maestro Federico Ruíz donó manuscritos a Biblioteca Nacional

1 agosto, 2018

El valioso material formará parte de la colección musical del Archivo Audiovisual

Texto:Renny Marrero/Foto:Adianez Gutierrez/Prensa IABNSB 01/08/018

Atendiendo al llamado de Biblioteca Nacional a participar en la campaña de donación de manuscritos y obras originales el maestro Federico Ruíz, reconocido compositor musical realizó la donación de cuatro partituras surgidas de su puño y letra que a partir de ahora vienen a enriquecer la colección musical venezolana del Archivo Audiovisual.

El experimentado acordeonista y compositor fue recibido por Ignacio Barreto, director del Archivo Audiovisual a quien hizo entrega del donativo no sin antes compartir una amena charla llena de anécdotas sobre el devenir musical contemporáneo del país y la importancia de la preservación y documentalización del material producido durante las últimas décadas.

Fueron cuatro las obras donadas por Ruíz, se trata de partituras que forman parte de su creación musical tituladas “Qué fácil es volar” (1970) versión para coro mixto a cuatro voces con poesía de Antonio Machado, fue dedicada en su época a la entonces niña Inés Bravo que hoy se destaca como violinista de la Filarmónica Nacional, le sigue la obra coral “Pieza breve”(1972) contiene textos de Antonio Machado, Ruíz la dedicó como testimonio de admiración a la maestra del piano Modesta Bor cuyo lenguaje musical fue ampliamente estudiado por el compositor, la tercera partitura donada por Ruíz se titula “Villancico”(1972) el texto está basado en poemas de Santa Teresa de Jesús y por último el manuscrito “Pieza para guitarra N°3” (1999) dedicada al guitarrista y compositor Rodriego Riera.

“Si en algún sitio pueden estar a buen resguardo estos originales es en la Biblioteca Nacional” comentó Ruíz agradeciendo la invitación que Ignacio Barreto le extendiera para realizar la donación de sus manuscritos, destacó que con la utilización del formato digital tiende a desaparecer la forma de composición manuscrita, por ello considera sumamente importante el resguardo de los trabajos que aún se conserven en formato físico, en su caso confiesa que desde el año 2002 compone directamente de forma digital.

Perfil sonoro

Federico Ruíz nació en Caracas en 1948, estudió composición musical en la Escuela Superior de Música “José Ángel Lamas” de Caracas junto a grandes figuras como Primo Casale, Vicente Emilio Sojo y Evencio Castellanos. Su primera obra la escribió en 1969, fue una sonata breve para flauta y piano. Egresó como Maestro Compositor en 1974. Estudió técnicas de Composición del siglo XX con Yannis Ioannidis, técnicas electroacústicas con Eduardo Kusnir, dirección coral y orquestal con Silvia Eisenstein y Gonzalo Castellanos.

Lo sinfónico, la música de cámara, la electroacústica y arreglos para corales forman parte de la producción musical de Ruíz que no solo es bastante amplia sino que se ha paseado por distintas vertientes culturales, a él debemos la musicalización de la opera “Los martirios de Colón” escrita por Aquiles Nazoa, también ha compuesto para cine y televisión trabajando con directores como Román Chalbaud cuyas películas Manon, La oveja negra y Pandemonium cuentan con bandas sonoras de su autoría, en cuento a la pantalla chica compuso la música de Al corazón de las tinieblas, una famosa serie de Televisión española y en teatro ha hecho lo propio dando acordes a obras como Casas muertas, de Miguel Otero Silva, El coronel no tiene quien le escriba, de Gabriel García Márquez y La tempestad, de William Shakespeare entre otras.

Su ardua labor en el ámbito artístico le ha hecho merecedor de múltiples reconocimientos municipales y nacionales, en 1964 con apenas 16 años se convirtió en Campeón Nacional Juvenil de acordeón. En 1976 le es concedido el Premio único de composición ‘‘Aniversario de la Universidad Simón Bolívar’’.

En 1981 obtuvo el Premio Nacional José Ángel Lamas para grandes obras sinfónicas. También la Asociación Nacional de Autores Cinematográficos ANAC le ha conferido premios por la música de La oveja negra y Pandemonium, esto entre 1987 y 1998 respectivamente. Fue director del Quinteto Cantaclaro, entre los años 1976 a 1994 se dedicó a la difusión de la música popular venezolana y latinoamericana, compuso también para el grupo teatral Rajatabla. En 2001 y 2004 recibió importantes reconocimientos municipales de teatro y cine, también el premio ANAC a la mejor música original.

Los críticos y admiradores de su estilo lo definen como complejo, el mismo resulta de la fusión de varias raíces de las que se nutre y que lo enriquecen: En Ruíz lo nacionalista venezolano se encuentra y se mezcla en sus arreglos con las técnicas de ejecución instrumental europea del siglo XX agregándole el sabor y mística de la música popular latinoamericana y caribeña. Cabe destacar que muchas de sus piezas han sido interpretadas y grabadas por reconocidos solistas y agrupaciones, entre estos la pianista Clara Rodríguez quien en 1995 recogió y grabó las obras para piano más importantes de este maestro, esto con el sello inglés ASV, el disco se titula Tríptico tropical, Piano Music of Federico Ruíz.

Actualmente el maestro Federico Ruíz sigue componiendo música, como acordeonista es solicitado frecuentemente para la animación de diferentes espectáculos y desde hace algún tiempo ameniza con música popular las veladas en un famoso Restaurant capitalino y está dedicado a digitalizar toda su obra musical, quienes deseen conocer un poco más de su trayectoria pueden disfrutar de una muy interesante entrevista incluida en nuestra página web en el apartado serial Memorias del tiempo.

Aquellos que deseen contactarlo pueden hacerlo a través del correo federicoruizh@hotmail.com

Galería:

El maestro junto a sus partituras 

“Qué fácil es volar” (1970), “Pieza breve”(1972), “Villancico”(1972)  y “Pieza para guitarra N°3” (1999) fueron las obras manuscritas donadas

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