Abuelos celebraron su día cantando y bailando en Biblioteca Nacional

29 mayo, 2019

Entre boleros, nostalgia y alegría, la sala Ciro Quintero celebró el Día del Adulto Mayor

Texto y foto:Renny Marrero/ Prensa IABNSB 29/05/019

La Sala de Prensa Comunitaria y Alternativa Ciro Quintero, adscrita a la Hemeroteca Nacional Leoncio Martínez, fue escenario de un encuentro muy especial en el que la nostalgia y la alegría se mezclaron para celebrar al ritmo de emblemáticos temas musicales el Día del Adulto Mayor.

La cita era para las 10:00 de la mañana, pero los invitados, casi todos del Club de Abuelos ‘‘Universidad de la Vida’’, y en su mayoría damas, llegaron con una hora de anticipación. El tiempo de espera no tuvo desperdicio. Sin esperar al conferencista, los asistents acompañaron con sus bailes y voces los temas que desde la corneta (a falta de rocola) se dejaban oir, y con ello trajeron al presente el embrujo de un género musical que nunca pasará de moda: el bolero.

Justo cuando sonaba ‘‘Sabor a mí’’, una de las más famosas canciones de Los Panchos, hizo acto de presencia José Antonio Cedeño, locutor y musicólogo, conductor del programa Colectivo Musical de Venezuela, espacio radiofónico especializado en ritmos caribeños. El investigador, quien se encargó de presentar el conversatorio ‘‘El Bolero en la hemerografía venezolana’’, celebró que su público hubiese tomado la delantera, pues aseguró que el evento no era una charla más, sino una terapia de la alegría.

 

¡Ese bolero es mío, es tuyo, es nuestro!

‘‘Hablar de bolero es hablar de emoción, de sentimiento, de amor, de despecho, de todo aquello que nos mueve y que nos hace humanos ¿Quién no se enamoró o quién no lloró alguna vez oyendo una de estas piezas musicales?", interrogó Cedeño, brindando de antemano una breve reseña histórica de lo que él define como el género romántico por excelencia.

Surgido en Cuba a mediados del siglo XIX, el bolero no tardó en convertirse en el signo musical de Hispanoamérica. Grandes intérpretes como Alfredo Sadel, Felipe Pirela, Julio Jaramillo, Benny Moré y Daniel Santos forman parte de una pléyade de artistas que expresaron su dolor y su angustia en canciones que los hicieron inmortales. Pero en el historial agridulce del bolero existen también estrellas eclipsadas que fueron injusta y rápidamente olvidadas, como por ejemplo Alcy Sánchez, El trovador de Quiscalla, autor del tema ‘‘Pesar’’.

También las mujeres se han hecho sentir en materia de despecho musical, destacó Cedeño, entre ellas ''Toña la negra'', Olga Guillot y Carmen Delia Dipini, así como Celia Cruz, ''La guarachera del mundo'', quien incursionó en el genero a inicios de su carrera musical y solía retomarlo en sus producciones una vez consagrada como una gran artista.

Entre las anécdotas musicales compartidas por Cedeño llamaron la atención del público varias relacionadas con las visitas de grandes boleristas a Venezuela. Una de ellas involucra a Daniel Santos, cuya canción ‘‘Tíbiri -Tábara’’ tuvo origen en un bar del mismo nombre que fue visitado por ‘‘El inquieto anacobero’’; otra demuestra que el bolero tiene profundas raíces en nuestro sentir, pues la canción ‘‘La despedida’’, que se hizo famosa en la voz de Daniel Santos, fue escrita el 22 de abril de 1941 en plena guerra mundial por Pedro Flores en repudio al conflicto bélico y como un canto de amor y esperanza.

Otro de los curiosos datos aportados por Cedeño asegura que, durante la estadía de Julio Jaramillo en Caracas, cierta dama abandonó al esposo para fugarse con el cantante ecuatoriano, al que se le atribuye además haber dejado descendencia en nuestra patria.

Y como lo prometido es deuda, el público no solo oyó con atención la cátedra musical que se les ofreció, sino que bailaron y corearon temas como ‘‘Dos gardenias’’ y ‘‘Piel canela’’, un toque mágico que tornó el conversatorio en un encuentro romántico y rocolero que permitió a los participantes rememorar qué canción los enamoró, con cuál se despecharon o cuál llegó a hacerles llorar.

Desengaños, bares y cantinas

‘‘El sentimiento expresado en el bolero fue tan auténtico porque reflejó las vivencias de sus intérpretes’’, expresó Cedeño, aludiendo a las conductas consideradas muchas veces inapropiadas de las estrellas de antaño.

 

Tal es el caso del cubano Benny Moré, quien, siguiendo el consejo de su colega Daniel Santos, resolvió cierto problema monetario con el empresario Max Pérez de una forma poco pacifica, lo que costó ciertos puntos de sutura al empresario y por lo menos 72 horas de arresto al intérprete de ‘‘Como fue’’.

Las complicadas vidas sentimentales de estos artistas y, en el peor de los casos, los tristes desenlaces de sus vidas también han quedado plasmados en sus temas musicales. Ejemplo de ello lo representa ‘‘Nosotros’’, tema popularizado por la Orquesta Aragón y que su autor, el habanero Pedrito Junco, dedicara a su novia como despedida final ante el padecimiento de una grave enfermedad que en efecto acabó con la vida del cantautor.

Otro final trágico fue el de Felipe Antonio Pirela Morón, a quien todos recordamos como Felipe Pirela. Este maracucho, orgullo del bolero venezolano y reconocido como ‘‘El bolerista de América’’ fue asesinado el 2 de julio de 1972 en San Juan de Puerto Rico. Se cuenta que durante su última presentación, ofrecida un día antes de su muerte en el bar El Molino Rojo, interpretó al menos cuatro veces seguidas la canción ‘‘Sombras nada más’’, un tango escrito en 1943 por José María Contursi y convertido en bolero por el mexicano Javier Solís en 1965.

Al pie de una rocola…

Era en los bares y cantinas en los que solían oírse los boleros gracias a las rocolas que funcionaban al introducirles un bolívar y hacer sonar aquellos inolvidables discos de 72 revoluciones por minuto. Luego llegaron los famosos LP, que permitían disfrutar de hasta 12 canciones. Ahora, en la era digital, el formato MP4 permite descargar discografías completas de cualquier artista; también Internet es un aliado útil. Quienes deseen conocer más de la historia de este género musical pueden visitar:

colectivomusicaldevenezuela.blogspot.com/

‘‘El bolero está en nuestro ADN, forma parte de nuestro sentir latino y nunca morirá’’, indicó Cedeño e invitó a oir este sábado de 11:00 de a 1:00 el programa Colectivo Musical de Venezuela, por RNV musical 630 AM, cuya próxima edición será en honor al cantante Carlos ‘‘Tabaco’’ Guzmán, famoso autor de temas como "La cárcel", "Mi calvario" y "Bolero frío".

 

‘‘Recreación y cultura son derechos impostergables a los que los adultos mayores debemos tener acceso sin restricción alguna. Damos gracias a la Biblioteca Nacional por siempre abrirnos sus puertas y celebrar estas actividades’’, comentó Rosa Alvarado, vocera del Club de Abuelos ‘‘Universidad de la Vida’’, cuyos integrantes se reúnen lunes, miércoles y viernes de 8:00 a 10:00 de la mañana en la Plaza de los poetas, frente al auditorio Juan Bautista Plaza.

La Sala de Prensa Comunitaria y Alternativa Ciro Quintero está ubicada en el nivel AP1 del Cuerpo de Servicios de Biblioteca Nacional y es un espacio de encuentro para quienes deseen rememorar a través de sus exposiciones hemerográfica las vivencias culturales y político-sociales que forman parte de nuestra identidad. La invitación es a participar del conversatorio ‘‘La guaracha salió de la prensa’’ que se llevará a cabo en sus espacios en conmemoración del Día del Padre.

FOTOGALERÍA:

Magaly de Paredes y su esposo Pedro Paredes rememoraron bellas vivencias con ‘‘Somos novios’’, de Armando Manzanero.

 

''Recordar es vivir'', la añoranza de amores y desengaños arrancaron lágrimas y sonrisas a las integrantes del Club de Abuelos ‘‘Universidad de la Vida''.

 

Una completa muestra hemerográfica documentó el devenir de un genero musical que se niega a morir

El público participó activamente reconstruyendo la historia de una epoca musical llena de recuerdos

Abuelas (y unos pocos abuelos) gozaron  un puyero con una jornada llena de canto, baile y alegría

Luces y sombras cubrieron el camino de los grandes boleristas, algunos brillaron intensamente, otrs fueron eclipsados tempranamente.

 

 

 

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