La Paul Harris promueve la educación permanente

10 junio, 2015

10 Junio 2015

Todas las bibliotecas públicas tienen su historia. Ésta no podría ser la excepción. Su nombre es un homenaje a Paul Harris, fundador del Rotary Club Internacional. Los integrantes de ese club quisieron regalarle a la comunidad una biblioteca. Por ello, para homenajear a su creador, la fundan y la llaman como él.

El 3 de julio de 1963, en una quinta ubicada entre la calle Roma y Bruselas de la California Norte, abrió sus puertas, bajo la tutela del doctor Alfredo Acuña y Hans Newman, con una colección de mil 300 volúmenes, un personal de dos técnicos en Bibliotecología y un auxiliar de biblioteca. El 6 de septiembre de 1969 esta biblioteca pública se trasladó a su nueva sede, construida en terrenos cedidos a la Fundación Paul Harris, por el Concejo Municipal del Distrito Sucre. El material bibliográfico y el mobiliario para la organización en la nueva sede, fueron donados por el Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes (Inciba). Luego, hacia el año de 1976, pasa a formar parte de la Red Metropolitana de Bibliotecas Públicas y su mantenimiento quedó en manos del Estado, a través del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas Públicas (IABNSB).

La Biblioteca Pública (BP) Paul Harris tiene como objetivo promover la educación permanente, poniendo a disposición una gran variedad de materiales bibliográficos y no bibliográficos. Los servicios constantes que presta están orientados a atender la población estudiantil a nivel de educación básica.

Esta biblioteca consta de cinco salas: general, infantil, referencial, de lectura; y un Infocentro; sus instalaciones son puestas a disposición de la Junta Comunal, del Club de Abuelos y de los niños, niñas y jóvenes pertenecientes a la comunidad de La California y zonas aledañas. La programación permanente de la Paul Harris está diseñada pensando en todos los habitantes. Por tal motivo, se ofrecen diversas actividades, como teatro, poesía, artes plásticas, danza y canto y se llevan a cabo de lunes a sábado. Los jueves y sábados en la tarde se dictan talleres de teatro a los niños y niñas de la comunidad, mientras que la lectura de poesía se realiza, dos días a la semana, en los diferentes planteles de la zona.

Como línea de trabajo, establecida por la Biblioteca Nacional, se impulsa constantemente el Programa Rafael Rivero Oramas, destinado a promover la lectura a nivel nacional, con el ideal de fortalecer los lazos con el mundo literario, y con ello facilitar el aprendizaje permanente de todos los miembros de la comunidad.
Hoy en día la BP Paul Harris, que cuenta con 21 mil volúmenes bibliográficos, se convierte en una referencia obligada para quienes la consulta se hace necesaria en tiempos en que la tecnología marca la pauta, pero nunca desplaza el contacto con el libro ni tampoco el espíritu mágico materializado en recintos como las bibliotecas.

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