El Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas cumple 44 años

27 julio, 2021

Bibliotecólogos y archivólogos celebran su día, frente a los nuevos retos que les presenta la tecnología y la pandemia por el Covid 19.

Texto: Jufany Toledo / Fotos: Prensa IABNSB

El Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas (IABNSB) cumple 44 años, dejando su huella en todo el territorio nacional, promoviendo el libro y la lectura en los más recónditos lugares del país, a través de su Red de Bibliotecas Públicas; y reinventándose para ofrecer sus servicios en tiempos de pandemia.

Son más de cuatro décadas de progreso, que sirvieron de estímulo para otros países de la región, que siguieron el ejemplo de la Biblioteca Nacional de Venezuela, cuya prioridad se centró en la formación de ciudadanía a través de la promoción del libro, la lectura, la investigación y la democratización de la información.

144 años después de haberse dado los primeros pasos para crear la primera biblioteca pública, el 13 de julio de 1833; se promulga la Ley del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, IABNSB, el 27 de julio de 1977, a partir de la cual, se ordena la construcción de una nueva sede y se crea la Red Nacional de Bibliotecas Públicas, empezando por el área Metropolitana de Caracas.

Con la creación de la Ley del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, esta se convirtió en depositaria del acervo documental bibliográfico y no bibliográfico de Venezuela y venezolanista, creadora y administradora del Archivo Audiovisual de Venezuela, del Centro Nacional de Conservación, la Hemeroteca, la Mapoteca; y en el núcleo coordinador del Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas.

Al resultar insuficiente el espacio de su antigua sede, en el Palacio de las Academias, el 1° de enero de 1981 se coloca la primera piedra del Foro Libertador, ubicado entre las parroquias de Altagracia y San José de Caracas, destinado a ser la nueva sede del IABNSB. Son 80 mil metros cuadrados que en la actualidad, resguardan y preservan la memoria histórica y documental de la nación, para el conocimiento y el disfrute de los venezolanos.

Importantes colecciones, con ejemplares que en algunos casos llegan a ser únicos en el mundo, se han convertido en el orgullo de los trabajadores  bibliotecarios y son motivo de alegría y celebración cada mes de julio; en el que además se conmemora el Día del Bibliotecólogo y Archivólogo; con lo cual se convierte en un mes de festejos, para quienes de una forma o de otra, hemos formado parte de la historia de la Biblioteca Nacional.

Este 27 de julio, al cumplirse un año más del día del bibliotecólogo y Archivólogo, creado mediante el Decreto N° 1564 del 22 de julio de 1982 y publicado en la Gaceta Oficial N° 32.522 del 23 de julio de ese mismo año; los profesionales de las ciencias de la información, tienen ante sí una serie de retos que les exigen repensar el ejercicio de su profesión.

En este momento, el primero de ellos ha sido la pandemia ocasionada por el Covid 19, lo cual ha limitado el acceso a los distintos servicios y colecciones, a objeto de cumplir con las normas de bioseguridad impartidas por la Comisión Gubernamental creada para tal fin; de manera que el servicio presencial se ha ofrecido a través de un sistema de citas.

En segundo lugar, las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, TIC; ya que los bibliotecólogos y archivólogos se formaron para custodiar y preservar libros y documentos impresos, ahora no solo les toca resguardarlos digitalmente; sino que además deben hacer propuestas para hacer un uso eficiente de estos nuevos formatos.

Los profesionales de las ciencias de la información, deben adelantarse a los avances y necesidades de las nuevas generaciones, y las bibliotecas tienen que estar a la par de los nuevos tiempos, razón por la cual el IABNSB creó la Biblioteca Digital de Venezuela “César Rengifo”, a través de la cual se puede acceder libre y gratuitamente a infinidad de documentos, que ya han sido digitalizados y liberados.

Para la Biblioteca Nacional es muy importante que la memoria sea activa. Su gran capital es la información, no sólo para almacenarla, sino más bien para ponerla al servicio de todos sus usuarios y demás miembros de las comunidades organizadas, con las cuales se mantiene un intercambio permanente de información.

Por tanto, su misión ha ido más allá de preservar la memoria histórica de la nación, se ha empeñado en ponerla al servicio de todos; con paso firme y efectivo, el IABNSB se ha venido adecuando a las nuevas tecnologías, utilizando la digitalización como medio para la preservación documental y a su vez favorecer, a personas discapacitadas y a quienes se encuentren lejos o con dificultad para acercarse a su sede.

A través de la Biblioteca Digital de Venezuela “César Rengifo”, se dinamizan las diversas colecciones y se colocan al alcance de todos los usuarios, que cada vez demandan mayores servicios de información. Ejemplares únicos e incunables, que por su carácter patrimonial y delicada naturaleza, tenían un uso restringido, comienzan a estar a la distancia de un click por  la dirección http://bibliotecadigital.bnv.gob.ve/#gsc.tab=0

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