Con cine cubano se recordó el 26 de julio en la Biblioteca Nacional

26 julio, 2017

El ciclo 10 días/40 películas proyectó hoy “La muerte de un burócrata” del director Tomás Gutiérrez Alea

Texto: Jufany Toledo /Fotos: Ronald Montaño

Recordando el 64° aniversario del asalto al Cuartel Moncada, ocurrido el 26 de julio de 1953; este miércoles en la sala de proyecciones del Archivo Audiovisual de Venezuela, se proyectó “La muerte de un burócrata”, un clásico del cine cubano, dirigido por uno de sus más talentosos realizadores, como lo es Tomás Gutiérrez Alea, quien también dirigió filmes de alta factura como “La última cena”; “Fresa y chocolate” y “Memorias del subdesarrollo”, entre otras.

La actividad formó parte de la programación aniversario de la Biblioteca Nacional, que inició el lunes 3 de julio y culmina este viernes 28, a fin de conmemorar la creación de la primera biblioteca pública para Caracas; así como también, los 40 años del Decreto de Ley del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, el 27 de julio de 1977; en el cual se ha venido ofreciendo un ciclo de cine denominado “10 días/40 películas”.

Ignacio Barreto, director del Archivo Audiovisual de Venezuela, informó que se habían seleccionado 40 largometrajes de reconocidos cineastas, catalogados entre los más importantes de la historia fílmica del cine venezolano, francés, italiano, español, alemán y latinoamericano en general; que simultáneamente se estaban proyectando en diversas bibliotecas públicas de la Red Metropolitana, para culminar este martes 1° de agosto con “El crimen del señor Lange” de Jean Renoir, con guión del destacado poeta francés Jacques Prevert.

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Igualmente, Barreto explicó que con esta extraordinaria selección de películas, daban inicio a un año de celebración del 40° aniversario del Archivo Audiovisual de Venezuela, creado el 27 de junio de 1978; tiempo durante el cual pretenden realizar en forma progresiva, la divulgación de las joyas documentales que se preservan, tanto en la división de Obras Planas como en la de Sonido y Cine, de esa colección.

La muerte de un burócrata” (1966), es una comedia en blanco y negro, a través de la cual se le hace una dura crítica al burocratismo existente en los primeros años de la Revolución Cubana, con la cual Gutiérrez Alea le rinde homenaje también al cineasta Luis Buñuel. Esta comedia inicia con el funeral de Francisco J. Pérez, proletario y obrero ejemplar, quien es enterrado con su carnet laboral, que luego es requerido para poder pagarle la pensión a la viuda, la cual queda sola en compañía de un sobrino que se encarga de intentar recuperar dicho carnet por las vías legales, encontrándose con un sinfín de trabas burocráticas que lo llevan a perder la razón y a cometer el asesinato del administrador del cementerio.

Tomás Gutiérrez Alea, nació en Santiago de Cuba el 11 de diciembre de 1928, se graduó en derecho en la Universidad de La Habana, y posteriormente cursó estudios de dirección cinematográfica en el Centro Sperimentale di Cinematografía en Roma. Regresa a Cuba para convertirse en uno de los padres de la cinematografía moderna de Cuba, donde realizó 13 cortometrajes y 13 largometrajes, alcanzando su consagración internacional en 1993, con “Fresa y chocolate”, una coproducción de México y España, en la que Gutiérrez Alea fue además el codirector. Un cáncer le impidió terminar su última película “Guantanamera” y falleció en La Habana el 16 de abril de 1996.

Siempre es 26. Para nosotros siempre es 26”

El 26 de julio cubano, conmemora el preludio de la Revolución Cubana, como fueran el asalto al Cuartel Moncada en Santiago de Cuba y simultáneamente al Cuartel Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo, a cargo de la Generación del Centenario, liderizada por el Comandante Fídel Castro, con el objetivo de alcanzar la liberación del pueblo cubano a través de la lucha armada; fue una gesta emancipadora, librada por jóvenes vanguardistas que sin duda alguna le rindieron a José Martí, el mejor homenaje que se le podía brindar en el centenario de su natalicio. Jóvenes combatientes y humildes, movidos únicamente por el interés de ver a su patria libre de la dictadura de Fulgencio Batista.

Durante este selecto ciclo de cine, se proyectaron también: El gran dictador de Charles Chaplin; La última tentación de Cristo de Martín Scorcese; Amor y muerte de Woody Allen; El Cartero de Michael Radford; El inquilino de Román Polansky; Elsa y Fred de Marcos Carnevale; Golpes a mi puerta de Alejandro Sadermann y Disparen a matar de Carlos Azpurua, entre otros largometrajes que se encuentran disponibles en las colecciones del Archivo Audiovisual de Venezuela, ubicado en el nivel AP-3 de la sede de los Servicios de Atención al Público de la Biblioteca Nacional.

 

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