Texto: Renny Marrero/ Fotografía: Adianés Gutierrez / Prensa IABNySB

«Porque los dioses ni comen
ni gozan con lo robado
y cuando nos dimos cuenta
ya todo estaba acabado»

Con el fin de informar sobre los adelantos y logros en materia de prevención de los delitos de intercambio comercial ilícito, saqueo, robo, hurto, despojo o sustracción de bienes culturales, se llevó a cabo una rueda de prensa por parte del Comité Técnico Venezolano de Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Bienes Culturales.

En la actividad participaron en calidad de ponentes y como miembros de dicho comité, Omar Vielma presidente del Instituto de Patrimonio Cultural (IPC), Rafael Aray Viceministro de Formación intercultural y saberes ancestrales del Ministerio del Poder Popular para los Pueblos Indígenas y el profesor Sady Loaiza Director del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y Servicios de Biblioteca (IABNySB), quien funge además como coordinador de la Plataforma de Patrimonio del Ministerio del Poder Popular para la cultura. El encuentro tuvo lugar en la villa Santa Inés, sede principal del IPC ubicada en la avenida principal de Caño Amarillo.

Con un efusivo saludo a los presentes, inició la rueda de prensa por parte de Omar Vielma quien recordó que esta actividad se circunscribe al esfuerzo por la preservación de la memoria histórica que realiza el Comité Técnico Venezolano de Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Bienes Culturales; éste comité señala Vielma, fue creado por el propio Comandante Chávez mediante la Gaceta Oficial de resolución 147 del 27 de septiembre de 2004, su objetivo principal es trazar líneas estratégicas en materia de prevención de este delito, que se posiciona como el tercer tipo de actividad delictiva más común a nivel mundial después del narcotráfico y la venta de armas.

Este Comité funciona en coordinación con una serie de instituciones del Estado entre ellas: Consejo Internacional de Museos (ICOM), Cancillería de la República, Ministerios de Defensa y el de Obras Públicas, Cuerpo Técnico de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) a través de las oficinas de INTERPOL, Aeropuerto Internacional de Maiquetía, entre muchas otras, cuya labor viene rindiendo frutos en materia de prevención y castigo del delito de tráfico ilícito de estos bienes que conforman el acervo patrimonial tangible de la nación. Tres casos que han marcado pauta fueron expuestos por Vielma, como ejemplo de los retos que enfrentan en la lucha contra este flagelo, y de como el comité ha sabido rescatar nuestro acervo en cuanto a bienes culturales.

La abuela, la odalisca y el estandarte del invasor
Pareciera el titulo de una novela policíaca o de misterio, mucho de ello hay en el relato de Vielma al referir sobre los casos de tráfico ilícito de bienes culturales venezolanos, protagonizados por el robo de la piedra conocida como la Abuela Kueka, que es una piedra del pueblo Pemón extraída de su lugar de origen en el año 1998 por el creador plástico Wolfang von Schwarzenfeld, para formar parte de su instalación escultórica denominada Global Stone, en el parque metropolitano Tiergarten en Berlín, Alemania. Para el pueblo Pemón, esta piedra representa parte de su cosmovisión y mitología de creación, su robo representa un crimen contra su cultura ancestral. En este sentido, se adelantan acciones jurídicas y diplomáticas para su reclamación .

El segundo caso lo representa el conocido caso del rapto de la Odalisca, cuadro del pintor francés Henri Matisse “Odalisca con pantalón rojo”. Fue robado del museo de Arte Contemporáneo de Caracas hace una década. El 04 de diciembre de 2002, se da a conocer que se trataba de una copia y no del original, el lienzo que permaneció guardado en la bóveda de la institución, a la pieza original trataron de subastarla en Francia; desapareció por una década y reapareció en EEUU donde la acción conjunta del FBI e INTERPOL permitieron su regreso a Venezuela .

Por último y no menos importante reseñó Vielma, el caso del intento de subastar en Francia en mayo de 2016, un fragmento del Estandarte o pendón de Guerra de Francisco Pizarro, recordemos que se trató de uno de los más sanguinarios invasores españoles; esta pieza histórica fue obsequiada a Bolívar por Antonio José de Sucre, y el Libertador la consignó a la Gobernación de Caracas como trofeo de guerra, el estandarte fue recuperado y se impidió su subasta el 19 de mayo del año en curso.

Lucha contra el neo colonialismo
En su intervención el Viceministro Rafael Aray, hizo énfasis en el valor de la cosmogonía impresa por los pueblos originarios en elementos como la piedra Kueka, por cuanto en ellos y a través de ellos, pervive la oralidad de sus generaciones; estos saberes ancestrales deben valorarse a la par de respetarse en su justa medida por cuanto conforman el acervo primigenio de nuestros ancestros aseveró .

Por su parte, el Coordinador de la Plataforma de Identidad, Patrimonio y Memoria Sady Loaiza acotó, que el trabajo de este comité es reactivar cada día la lucha por nuestra Identidad como Nación, defender nuestro acervo histórico es la única vía para preservar nuestra identidad patrimonial, la odalisca, el estandarte y la piedra Kueka forman parte de la lucha constante del Gobierno Bolivariano por preservar esa identidad. En tal sentido, el tráfico ilícito de bienes patrimoniales es un delito contra la Patria, la agenda cultural Bolivariana que construimos de manos de nuestro camarada y presidente Nicolás Maduro, viene a sensibilizar a los servidores públicos y funcionarios de las distintas instituciones culturales en materia de prevención de este delito, por cuanto evitarlo, es salvaguardar nuestros preciados bienes patrimoniales.

Así mismo, Loaiza agradeció el esfuerzo de los distintos entes que conforman el Comité Técnico Venezolano de Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Bienes Culturales, por defender la verdad de los esfuerzos que realiza el Gobierno Bolivariano, por defender la Patria a costas de lo que sea, fraseando a Augusto Mijares en Voz de Hugo Chávez, esa es la tarea de quienes sentimos a la Patria en lo más profundo, hasta en las vísceras, señaló.

Dos casos patéticos de saqueo cultural, lo representan el hecho de que la escultura original de Nefertiti no repose en suelo egipcio, sino en un museo de Alemania y que en París, en el Museo de Louvre se muestren el Obelisco y la Tumba de Ramsés II, como trofeos de saqueo de Napoleón en una oda a la práctica de arrase y saqueo de las culturas de las naciones; Venezuela está incorporada desde 1970 a la comisión de la UNESCO en la lucha contra este delito, por lo que aboga que tanto sus bienes culturales como los de otras naciones afectadas (caso de Egipto), sean devueltos a sus territorios originales, por formar parte de la identidad de sus pueblos en una lucha contra el neo colonialismo y el saqueo cultural.

Para Venezuela el retorno de la Abuela Kueka, es un acto de soberanía y reclamarla nuestro derecho a la resistencia cultural contra los invasores de ahora y de siempre, entonando si es preciso el Canto guerrero de los Cuicas: «Padre Ches dame una flecha aguda que mate al invasor. Templa mi brazo; que dispare esa flecha sin temor. Yo soy tu hijo, Oh Ches mi señor, yo soy tu esclavo, Oh Chía mi señora, dame la chicha de tu inmenso valor. Dame a comer en carne el odio al invasor».