Francisco Pimentel, uno de los mejores compositores de versos de Venezuela

30 agosto, 2019

                       

A 130 años del natalicio de “Job Pim”, la Biblioteca Nacional pone a disposición de sus usuarios, las obras que sobre este periodista, poeta y humorista existen en sus colecciones

Texto: Jufany Toledo/ Fotos: Renny Marrero y archivo / Prensa IABNSB

Al cumplirse 130 años del natalicio de Francisco Pimentel, conocido también por sus seudónimos “Job Pim” y “El Jobo”, el Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, IABNSB, rinde tributo a este prolífico hombre de letras, considerado uno de los mejores versificadores de Venezuela, cuyos textos se encuentran en la colección Bibliográfica General, y su antología puede descargarse desde la Biblioteca Digital de Venezuela César Rengifo.

Francisco Pimentel Agostini es el vivo ejemplo de que “hijo de gato caza ratón”, ya que sus padres también fueron personas del mundo de las letras. Francisco Pimentel Anderson fue escritor y miembro de Número de la Academia Venezolana de la Lengua y su madre, Margarita Agostini Caspers, una gran apasionada de la literatura, quien sembró en sus hijos ese gran amor por la lectura y la escritura. De hecho, fue la hermana de “Job Pim”, Cecilia Pimentel Agostini, quien después de su muerte se encargó de compilar su producción literaria y publicarlas bajo el título de “Obras completas”.

                         

Francisco Pimentel Agostini nació en Caracas el 1° de septiembre de 1889. Estudió bachillerato en el Colegio Santa María; y comenzó estudios de Derecho, carrera que no terminó, ya que para entonces descubrió que su vocación eran las letras, la literatura; de manera que la palabra fue su principal herramienta de trabajo, y a través de ella se convirtió en periodista, humorista, dramaturgo y poeta; también fue político y diplomático. Durante la presidencia del general Eleazar López Contreras, fue cónsul de Venezuela en España.

La carrera periodística la inició en 1913 en “El Nuevo Diario”, también fue colaborador en los periódicos “El Universal”, “El Imparcial”, “La Esfera”, “El Morrocoy Azul” y “El Heraldo”, del cual fue co-fundador, y escribió para las revistas “Élite” y “El Cojo Ilustrado”. En 1918 fundó su propia revista, a la que denominó “Pitorreos”, en ella colaboraron muchos jóvenes escritores de la época, entre quienes destacaba su amigo Leoncio Martínez. Muchos de esos textos pueden verse en la colección hemerográfica de la Biblioteca Nacional.

Al cabo de un año, “Pitorreos”, ya convertida en un diario, fue mandada a cerrar por órdenes de Juan Vicente Gómez, los archivos fueron destruidos y, junto con “Leo”, fueron a parar a “La Rotunda” (la famosa cárcel caraqueña de los tiempos gomecistas). Ese fue el primero de los tres encarcelamientos que sufrió “El Jobo”, quien a lo largo de sus 52 años, pasaría 9 encarcelado, sin que las huellas de las torturas sufridas y los pesados grilletes, lograran socavar su elevado espíritu y su gran humor. Muy por el contrario, sirvieron para agudizar su verbo y perfeccionar su sátira.

                     

Años más tarde, en 1923, junto a su inseparable amigo Leoncio “Leo” Martínez, comenzó en “Fantoches”, que en sus inicios fue un semanario, y dada su gran popularidad y demanda, se convirtió en diario. Gran parte de sus obras las firmó con el seudónimo de "Job Pim", por el cual fue mayormente conocido.

Sin dejar a un lado el gran sentido del humor, que siempre le caracterizó, Francisco Pimentel podía abordar desde los temas más importantes del momento, hasta las situaciones más triviales. Con un profundo compromiso sociológico lograba captar a sus lectores, escribiendo sobre las situaciones cotidianas que aquejaban a la sociedad, las cuales lograba poner en verso; a través de ellos, Job Pim daba lecciones, ofrecía moralejas, y hasta a los más importantes y serios asuntos era capaz de ponerles rima y construir un verso.

                   

Con su verso “Desahuciado” anunció su pronta muerte; y con versos fue despedido por sus amigos Miguel Otero Silva, que le escribió el soneto “En la muerte de Job Pim”, y Andrés Eloy Blanco hizo lo propio con la glosa “La musa popular despide a Francisco Pimentel”. Así fue: una vieja dolencia en el estómago, que le empezó durante uno de sus presidios, lo acompañó hasta la muerte. Pocas horas después de haberse sometido a una intervención quirúrgica, falleció en Caracas el 12 de agosto de 1942.

Francisco Pimentel es tal vez uno de los escritores menos reconocidos de su generación; sin embargo, en la parroquia San Juan hay una gran escuela que lleva su nombre, y la Biblioteca Nacional resguarda sus textos, entre ellos: sus “Obras Completas”; “Argumentos de Ópera”; “Antirripios de ultramar y otros tópicos literarios”; “Pitorreos: Recopilación de crónicas rimadas y hebdomadarias publicadas en esta sabrosa Villa de Santiago de León de Caracas”; “El loro pervertido y otras fábulas”, ilustrado por Richard León Loenice; “Graves y Agudos”; y “Antología”, con nota introductoria y selección de Eduardo Michelena y J. L. Salcedo Bastardo.

                             

 

Es          Este último puede descargarse por completo, en archivo PDF, ya que se encuentra liberado en la Biblioteca Digital de Venezuela César Rengifo, el cual contiene una selección amplia de poemas, breves obras teatrales cómicas y diversos textos en prosa de carácter humorístico. Las secciones del libro están tituladas igual que las columnas que mantuvo en varios periódicos y revistas entre 1914 y 1942: Pitorreos, Urbanas, Fábulas, Sal de Pim, entre otras.

 

DESAHUCIADO

Me han visto nueve médicos. Los nueve,
de nuestra Facultad ornato y gala.
Los nueve encuentran mi salud tan mala,
que me debo morir en plazo breve.

Congestión en el hígado, y no leve;
bronquitis, de la tisis antesala;
un riñón de su puesto se resbala
y el colon no funciona como debe.

Yo morir no me siento... Pero ¿cómo
nueve sabios así de tomo y lomo
se van a equivocar sobre mi suerte?

¿Que me debo morir? ¡Venga la muerte!
¡Todo antes que dejar en la berlina
a media Facultad de Medicina!

 

 

 

 

 

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