Andrés Eloy Blanco, 121 años trascendiendo fronteras con sus versos

7 agosto, 2017

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Sus fuentes de inspiración fueron el amor por su nación, su buen sentido del humor y el respeto por la justicia social

Texto: Fabiola Cesin/ Fotografía: José Chacón/ Prensa BNV

Para profundizar y escudriñar la vida y obra de uno de los más grandes maestros de la literatura y amante de la poesía como lo fue Andrés Eloy Blanco, se consultó el material documental biográfico existente en el archivo del Servicio de Préstamo Especial del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas.

Conocer la vida y obra de un insigne político, poeta, humorista y ante todo un gran luchador social, que dejo en alto el tricolor nacional, facilita afianzar el compromiso que tenemos cada uno de los venezolanos y venezolanas que compartimos el pensamiento de igualdad de Andrés Eloy Blanco Meaño, quien nació en Cumaná, estado Sucre, un 6 de Agosto de 1896 y falleció el 21 de Mayo de 1955 en Ciudad de México.

Reconocido mundialmente por ser miembro de la “Generación 28” y por la nobleza social inmersa en todos sus poemas, entre ellos, Coloquio bajo la palma y Un canto a la superación, el trabajo y el estudio en busca de las luces libertarias; es fácil afirmar que sus fuentes de inspiración fueron el amor por su nación, su buen sentido del humor y el respeto por la justicia social, como muestra de ello, el poema Pintame Angelitos Negros, con el que pudo trascender fronteras, a favor de la lucha contra la discriminación racial.

Desde muy temprana edad resaltó dentro de los círculos de intelectuales e integrantes de las sociedades artísticas de Caracas, obtuvo el título de Abogado, egresado de la Universidad Central de Venezuela, tuvo la virtud de sobresalir académicamente, gracias a su indiscutible actitud contestataria, que lo encaminó a participar en las manifestaciones en contra del gobierno de Juan Vicente Gómez

Un año más tarde, sorprende a sus lectores con la creación de los poema Canto a la espiga y al Arado, con el que obtuvo uno de sus primeros premios. Posteriormente, publicó El huerto de la epopeya.

Al terminar sus estudios, comenzó a ejercer la abogacía, y paralelamente continuó escribiendo, para el año 1923 obtuvo reconocimientos internacionales en los Juegos Florales de Santander, España, con su poema Canto a España, este logro permitió que se dirigiera a Europa y se codeara con los otros grupos vanguardistas. En 1924 fue nombrado miembro de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, posteriormente, visitó La Habana, donde compartió con intelectuales cubanos y venezolanos exiliados.

Basándonos en las muestras biográficas de Andrés Eloy, extraídas del repertorio documental de la Biblioteca Nacional de Venezuela, donde se asegura que para el año 1928, se convirtió en el editor del periódico clandestino “El Imparcial”, con una variedad de artículos relacionados con el acontecer de las jóvenes Claudia Rodríguez, Isabella Avendaño, Katherine Saavedra, Elizabeth Gómez, Paula Contreras y Vanescka León (Las Reinas del mundo), dicho material comunicacional, fue nominado a la feria de la ciudad de Maracaibo, el cual se convertiría en el órgano de difusión de las proscritas agrupaciones Unión Social Constructiva Americana y Frente de Acción Revolucionaria

Tras el golpe de estado del 7 de Abril, fue privado de libertad y llevado al Castillo de San Felipe en Puerto Cabello hasta el año 1932, durante su encierro, escribió Barco de piedra y Poda, una colección en la que destacan los poemas Las uvas del tiempo y La Renuncia.

A partir de 1936, bajo el mandato del presidente Eleazar López Contreras, se le fueron otorgados cargos de gabinete, pero por sus consecutivas desacuerdos con el gobierno, no pudo continuar. A principios del año 1940, su Partido Democrático Nacional, se adhirió a Acción Democrática, y en 1946, estuvo a cargo de la Asamblea Nacional Constituyente, que instauró el voto universal, directo y secreto.

Eloy Blanco, decidió apoyar la campaña presidencial de Gallegos en 1947, al ser derrocado en noviembre del año 1948, se exilió en México, durante su estadía dedicó su tiempo a la escritura, hasta su trágica muerte.

La Biblioteca Nacional custodia las colecciones de Andrés Eloy Blanco

Más que hojear y observar sus obras, la invitación es admirarlas; profundizar cada verso, y analizar cada uno de sus párrafos, al hacer esto, se podrá apreciar el verdadero acumulado espiritual de la patria que él enaltecía, y sobre todo la sencillez, la ironía y el humor que lo caracterizaba.

Por tal motivo, se sugieren algunas de las colecciones del prestigioso poeta que se encuentran albergadas en el servicio de préstamo especial del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, algunas de ellas, Baedeker 2000/ cota: V861.46- B641.PO; Poda/ cota: V861.41- B641PO; Obras Escogidas/ cota: V861.44- B641OB V.1 E.3; Poesía/ cota: V851.44- B541PON; La Juambimbada, entre otras.

Como dato curioso, vale señalar que también en la división de Libros Raros y Manuscritos de la Institución, existe la colección de manuscritos del poeta y ensayista venezolano Andrés Eloy Blanco, lo conforman libretas con poemas ilustrados por el mismo autor, cuadernos con notas de investigación, ensayos, obras de teatro, conferencias y discursos. Estos manuscritos son en su mayoría mecanografiados con notas y correcciones hológrafas, aunque también vemos numerosos textos totalmente hológrafos.

En cuanto a sus poemas sueltos podríamos mencionar los siguientes: Retrato; El soneto emocionado a los ojos de Chichi Goiri; La niña de las estrellas, Hemoterapia Heroica; Regalo a Sandro Mondolfi; La Juana Bautista; Cuando estés de regreso a tierra; Sospecha; Aquí estamos los hijos de las madres vivas, entre otros.

Asimismo, podemos leer entre estos documentos los ensayos: Elegías constitucionales: La Santita Jacobina (Ensayo histórico referido a algunos aspectos de la Compañía Guipuzcoana); Las proporciones reales de la responsabilidad (Ensayo sobre corrupción administrativa en Venezuela y otro texto titulado, Las muertes paralelas, donde hace referencia a un libro escrito por Jesús Sotero sobre Emilio Zapata.

Si nos referimos a los discursos que se conservan en las carpetas de esta colección, nos encontramos con uno de ellos pronunciado por Andrés Eloy con motivo de la muerte del poeta español Antonio Machado y otros titulados: Sueño de un español bajo una encina; El estatuto electoral; Discursos parlamentarios y un discurso en homenaje a Leonardo Ruíz Pineda. Cuenta también esta colección con las siguientes obras de teatro: Los presos (obra incompleta) ; La mujer de la trenza morada; Caoba (argumento general); Alcoba azul para tus verdes, esperada mía.

Por otra parte, se debe mencionar los numerosos textos humorísticos que se encuentran en dicha colección de manuscritos, con certeza se puede afirmar, que muchos de sus textos fueron escritos en la prisión. Estos manuscritos pueden ser consultados en la Colección de Libros Raros y Manuscritos de la Biblioteca Nacional de Venezuela.

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